ALICIA ALMENDROS.- Ansiedad, estrés, bajas por positivos en COVID, sobrecarga de trabajo, agotamiento físico… Esta es realidad que las 325.000 enfermeras españolas viven a diario. Y es que el colectivo de enfermería ha sido uno de los más afectados durante estos casi dos años de pandemia, especialmente en esta sexta ola donde el cansancio es más que evidente. Ante este escenario, la Organización Colegial de Enfermería ha lanzado una encuesta para conocer en profundidad y cuantificar estadísticamente las opiniones del conjunto de los profesionales para establecer las estrategias oportunas. «Las enfermeras están agotadas. En España hay una enfermera por cada 2.500 ciudadanos, cuando la media europea es una por cada 1.000. Si esto es inabarcable en una situación ordinaria, en una pandemia es imposible de sobrellevar. Por eso, queremos evaluar cómo están con datos para demostrar a las administraciones que la situación es insostenible y deben poner una solución si no quieren que nuestras profesionales se marchen a otros países o abandonen la profesión para siempre”, explica Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.
La situación anterior al COVID ya era precaria. Si a esto le sumas dos años de lucha en primera línea contra el COVID sin apenas recursos la situación es insostenible. “Necesitamos que el Gobierno y las consejerías reconozcan la labor de las enfermeras y cubran sus necesidades. No se trata de poner parches, ni de superar la pandemia si no de prestar una atención de calidad a los pacientes sin dejar de lado los derechos de las enfermeras”, finaliza Pérez Raya.